Apenas comienza el día, el día en que nuestro equipo puede reescribir con letras de oro su centenaria historia. Volvemos a tener la oportunidad de marcar con letras de oro el nombre del Sevilla FC en los anales futbolísticos. No sé si somos conscientes de lo que estamos a punto de conseguir, ya es un éxito disputar una final europea por segundo año consecutivo, algo de lo que muy pocos equipos pueden presumir, solo algún grande, solo alguno, no todos, no los que prefieren ganar trofeos de verano desde luego.
Y es que el Sevilla puede reescribir la historia esta noche por muchos motivos, pero me quedo con dos:
1. Solo el Real Madrid ha sido capaz de ganar de forma consecutiva dos títulos de la UEFA.
2. Este para mí el más importante. Demostrar a toda la división mediática, periolistos, futbolistas y dirigentes del tres al cuarto que ese cuento de que no se pueden jugar tantos partidos porque pasan factura es solo eso, un cuento. Todo un modesto, para ellos claro, los periolistos mandrileños, que ya con lo que ha conseguido hasta hoy, incluso perdiéndolo todo, ya ha hecho más que por ejemplo el equipo de la capital madrileña en los últimos 3 años....y no digamos lo que supone si lo comparamos con el equipo del Guau Guau.
Esta noche el equipo más grande del Sur de Europa debe sentir como nunca el aliento de su afición. No quiero relajaciones, no quiero conformismos. Los aficionados no podemos ahora bajar los brazos y creernos que ya todo está hecho y que vamos a ganar de calle. No es así, el español recordemos ha sido el único equipo capaz de sacarnos los colores en los últimos dos años y tiene suficiente calidad arriba para amargarnos la noche.
Esta noche el equipo más grande del Sur de Europa y la afición de ese mismo equipo deben ser una unidad pase lo que pase. No me gusta cierto ambiente que estoy viendo estos días por parte de algunos sectores. Hay que apoyar al equipo a muerte, hasta la muerte, pase lo que pase. No quiero ni imaginar que se alzaran voces críticas en caso de derrota. Debemos ser conscientes de que el equipo está respondiendo por encima de sus posibilidades, de su presupuesto y de muchas otras cosas y sentirnos orgullosos de lo que se haga.
Ahora bien, que tiemble España entera si a eso del filo de la medianoche nuestro capitán, JAVIER NAVARRO, mi tocayo, vuelve a levantar la copa de Campeón de la UEFA. Muchos van a tener que tragarse la mierda que han soltado por su boca o por sus teclados tiempo atrás, que tiemblen los supuestos grandes de nuestro fútbol porque estoy seguro de que volveremos a dar una gran lección a toda la orbe futbolera.
Esta noche Glasgow debe convertirse en la nueva Eindhoven, en su relevo, y allí debe quedar un trocito de nuestro corazón y que se venga para acá un trocito del suyo.
Y que bonito es jugar con la bandera de tu País en la espalda, que bonito y que ejemplo....
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